Lorquí es un municipio enclavado en la Vega Media del Río Segura en su margen izquierda que une cuatro provincias desde que nace en Pontones (Jaén), pasando por tierras de Albacete hasta entrar en la Región de Murcia y, tras recorrer distintos municipios llega a Lorquí y desemboca en Guardamar (Alicante). Ligada a una agricultura tradicional de frutales y hortalizas herencia de pueblos prehistóricos, romanos y árabes hasta el momento actual. La muestra son sus norias y acequias.
Se encuentra en el ensanche del pueblo, salida del municipio hacia Ceutí. El Ayuntamiento construido en 1995, durante el mandato del alcalde socialista D. Antonio Carbonell. A sus espaldas y cerca del río Segura se encuentra el Parque de la Constitución, donde nos vamos a dirigir.
Parque amplio con auditorio abierto, pistas de bolos huertanos, petanca, servicio de parking para caravanas, restaurante y al fondo escultura de “amapola mutante” del artista Javier García Herrero. A la derecha subimos a la mota del río.
Se observa desde el pequeño parque elevado de la mota el paso de las aguas del río y el tipo de vegetación de ribera. Debemos hablar de la fauna que hubo y existe.
Caminamos por el margen de la mota hacia Archena, observando la huerta. En “el Diente”, lugar del río que servía de baño hace unas décadas, mirando la pedanía de Los Palacios Blancos, repasamos las frutas y hortalizas de cada temporada. Después la mota se convierte en camino asfaltado hasta Los Palacios, dejando a la izquierda la mota de tierra que lleva a Archena.
La casa de La Cierva es un antiguo palacete rural que tiene unos antecedentes del siglo XIX, llamada entonces finca de Santa Catalina, pero a primeros del siglo XX Juan de la Cierva y Peñafiel (Ministro y Presidente de Gobierno durante el reinado de Alfonso XIII), se hizo con un gran número de tierras desde La Algaida hasta los Palacios Blancos en Lorquí y dentro del lote adquirió la casa a D. Sebastián Servet.
La construcción presenta dos momentos: por un lado la casa rural del siglo XIX, de la que posiblemente sea parte de la torre y otros elementos arquitectónicos y el engrandecimiento y transformación de ésta en palacete sobre 1915 por parte de la familia de la Cierva. Es interesante destacar su estructura de casa-torre, singularidad de la huerta de Murcia y que constituía, junto con las barracas el paisaje arquitectónico de esta. Destacan las almenas y la forja de sus cerramientos con un patio central que confieren al conjunto caracteres románticos e historicistas.
Además Juan de la Cierva construyó una fábrica a partir de 1919, anexa al palacete y pionera entre las fábricas conserveras de Lorquí. Destacan las dos chimeneas, una de planta circular y otra cuadrada, completan un conjunto arquitectónico de gran valor cultural. La finca de La Arboleda fue la primera de regadío sobre antiguas tierras de secano. Funcionaba con tres motores eléctricos y regaba más de 5.000 tahúllas de tierra.
Este lugar es emblemático, pues tiene una historia desde época ibérica por los restos hallados en Los Palacios: argáricos y romanos principalmente. A la salida de la finca había una casa de postas desde época romana.
Juan de la Cierva, en 1920 se llevó el Cuartel de la Guardia Civil desde el centro del pueblo a los Palacios, igual que se abrió un Colegio Municipal y Escuela unitaria.
Salimos de la Casa de La Cierva y marchamos por el carril o camino de la Condomina que lleva a la noria de El Rapao, pero a unos pasos del acueducto que lleva a la noria.
Pudo ser construida en el siglo XVIII para regar las tierras de D. Alejandro Marco. Su estructura de hierro y madera con 112 cangilones y 156 paletas, llegó a regar más de 300 tahúllas. Está declara Monumento Histórico Artístico Nacional.
Marchamos del entorno de la noria de El Rapao por el camino de la Condomina por la acequia árabe (de tiempos del Rey Lobo) hacia Lorquí.
Molino de agua ubicado en el paraje de La Condomina, situado junto a una de las acequias menores que derivan de la acequia Mayor de Molina. Conocido en tiempos anteriores como Molino de La Encomienda y que mantiene toda su estructura hidráulica y de molienda. Posiblemente en tiempo de la desamortización pasó a manos privadas, teniendo sucesivos propietarios hasta que llegó a manos del abuelo de D. Francisco Pérez.
Cerca está el merendero-asador “El Cordero”, para reponer fuerzas.
Seguimos después de “El Cordero” hasta llegar a la fábrica de pimentón Martínez Lozano, de la famosa marca Mickey, en el paraje de las Carrascas.
Debemos cruzar la carretera que lleva desde la autovía hacía Ceutí, para pararnos en la noria. Noria situada en el casco urbano Siguiendo por la calle de La Noria se llega al Ayuntamiento.
Para reparar fuerzas, está el Centro de Mayores y su bar.